Seguro que lavas las sábanas de la cama junto con la funda de almohada. Ahora bien, ¿sabías que cada cierto tiempo también debes limpiar tu almohada para evitar la aparición de ácaros y bacterias y prevenir alergias?
Mucha gente piensa que no es recomendable lavarla porque no se seca bien y la humedad de su interior potencia la aparición de ácaros. Sin embargo, es justo el caso contrario. Si no se lava la almohada, la suciedad se acumula y ahí sí que pueden aparecer hongos, bacterias y ácaros.
¿Qué encontrarás en este artículo?
Cómo lavar una almohada
Antes de lavarla, es imprescindible mirar la etiqueta del fabricante donde se incluyen las instrucciones para su limpieza. En este sentido:
Es importante que tengas en cuenta la temperatura máxima recomendada, aunque por regla general no deberías lavarla a más de 40ºC.- También debes prestar atención al relleno. Antes de meterla en la lavadora, asegúrate si es de plumas o sintética para evitar deformarla o dañarla. Como ya sabrás, las plumas son muy delicadas y es preferible no arriesgarse.
- Es recomendable lavar las almohadas entre dos o tres veces al año. Eso sí, cada vez que lo hagas, asegúrate de que no tenga ningún descosido o roto para evitar que aumente de tamaño y pierda parte del relleno en el lavado.
Cómo lavar una almohada según el material de su relleno:
Almohada viscoelástica
Si es una almohada de visco moldeada, no la metas en la lavadora. Tendrás que lavarla a mano de la siguiente manera:
- Vierte en un recipiente con agua tibia un poco de detergente suave.
- Humedece un paño para limpiarla mediante movimientos circulares.
- Sírvete de una toalla para quitar la humedad.
- Déjala secar en un lugar limpio y bien ventilado.También puedes utilizar una aspiradora empleando su cepillo de cerdas suave para secarla con cuidado.
Descubre otras maneras de limpiar tu almohada de viscoelástica en este artículo.
Almohada de látex
En cuanto a las de látex que sí deben lavarse, lo más acertado es olvidarse de la lavadora y hacerlo a mano, salvo que en el etiquetado se especifique lo contrario. Para ello:
- Llena un recipiente de agua tibia y añade un poco de detergente especialmente indicado para prendas delicadas.
- Introduce un paño limpio en la mezcla, retira el exceso de agua que pueda tener para no humedecerla demasiado y limpia poco a poco la almohada con movimientos circulares. De esa forma, conseguirás eliminar las manchas.
- En cuanto al secado, utiliza toallas limpias para acabar con la humedad y colócala en un lugar seco sin que le dé el sol directamente.
Almohada de plumas o plumón
Además, para tener un buen cuidado de este tipo de almohadas, toma nota de estos consejos: Se pueden lavar en la lavadora pero deberás asegurarte seguir estos pasos: Las almohadas pierden su color blanco por varias razones. De hecho, en su lugar aparecen antiestéticas manchas amarillas, fruto del sudor que liberamos al dormir para mantener una adecuada temperatura corporal. Sin embargo, existen otros motivos que pueden explicar las manchas de las almohadas: grasa del cabello, saliva que derramamos al mantener la boca abierta, cremas faciales o sangre. El mejor consejo para evitar estas manchas es la prevención. Las fundas de almohada actúan como una barrera protectora eficaz. Pero se deben lavar regularmente. Para eliminar o disimular manchas amarillas: Prepara un recipiente con agua y un poco de detergente para prendas delicadas. Una vez lo hayas mezclado bien, vierte una esponja o trapo limpio, escurre bien el agua y limpia las zonas amarillentas. También puedes utilizar un poco de lejía para hacerlas desaparecer. Si tu colchón también tiene manchas amarillas, te contamos cómo puedes limpiarlas. En el caso de manchas de sangre recientes, emplea agua fría para disolver la mancha tanto como sea posible. Si están secas, utiliza un cepillo de dientes para raspar y reducir los residuos al máximo. Después, añade un poco de bicarbonato sódico a una taza de agua fría y extiendela sobre el área manchada. Utiliza una esponja y haz movimientos circulares para aclarar la mancha y seca la zona con una toalla. Si además, la mancha de sangre también se encuentra en las sábanas, te contamos cómo limpiarla. Otro consejo sencillo y eficaz consiste en sacudir la almohada enérgicamente todos los días para que gane volumen, evitar que se acumule polvo y mejorar tu descanso. Incluso al cambiar la funda, puedes utilizar un aspirador de mano con filtro HEPA para limpiar todas las partículas. Y algo importante, no olvides lavar la funda junto con la ropa de cama semanalmente. Así como también limpiar bien tu colchón o accesorios temporales como los edredones y nórdicos. Licenciada en publicidad y relaciones públicas por la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Especialista en copywriting, investigadora incansable y ejemplo de vida saludable, su facilidad con las palabras le ayuda a transmitir a los lectores los detalles de aquellos productos de descanso que prueba.
Almohada de fibra o sintética
Cómo eliminar las manchas de almohada
Manchas amarillas
Sangre
Consejos para mantener limpia una almohada