¿Te suele suceder que, al despertar, sientes que aún estás cansado? Si es así, es muy probable que no estés teniendo el suficiente sueño profundo. Y es que esta fase del sueño es imprescindible para nuestra salud física y mental y su falta está asociada a algunas enfermedades y trastornos del sueño.
Si utilizas una pulsera de actividad o un reloj inteligente, quizás hayas podido comprobar si necesitas descansar más en esta fase.
Pero, si no, en el artículo de hoy te contamos cómo descubrir si te falta y algunos consejos para conseguir que sea más duradero. Además, descubrirás qué es el sueño profundo, por qué lo necesitamos.
¿Qué encontrarás en este artículo?
¿Qué es el sueño profundo?
Es la cuarta y anteúltima fase de cada ciclo, y en ella el cuerpo lleva a cabo una serie de funciones metabólicas y hormonales imprescindibles para la recuperación física y psíquica, que dan como resultado que el sueño sea reparador. Por eso se dice que es la fase que determina la calidad del descanso.
A lo largo de la noche vamos atravesando diferentes ciclos de sueño. Durante estos, cuya duración es de 90 minutos aproximadamente, se van encadenando cinco fases y divididas en dos tipos, no REM y REM. Las primeras cuatro fases corresponden al sueño no REM.
Entre esta tercera fase y la quinta, última fase del ciclo, la REM, tiene lugar la más importante: la fase de sueño profundo.
A diferencia de las etapas de sueño ligero, durante la fase de sueño profundo, es muy difícil despertarse y, si esto ocurre, se experimenta una sensación de confusión. Por ello se recomienda utilizar métodos para evitar despertarse durante esa etapa. La importancia del sueño profundo radica en que, durante esta fase en la que nuestro organismo parece pausarse totalmente, en realidad tienen lugar una serie de procesos vitales para su correcto funcionamiento. Para que te hagas una idea, te detallamos los más relevantes: Esta fase del descanso ayuda a reorganizar las conexiones cerebrales, restaura el mecanismo prefrontal del cerebro que regula las emociones evitando la escalada de ansiedad. El sueño profundo dura entre 20 y 40 minutos en el primer ciclo de la noche y va disminuyendo hasta casi desaparecer en los últimos ciclos. Representa normalmente entre un 10% y un 15% del sueño total. Sin embargo, es normal que el sueño profundo disminuya con la edad como indican algunos estudios. Hasta los 30 años, este es más necesario para el crecimiento, regeneramiento muscular y de tejidos, y consolidación de recuerdos que puede llegar hasta las 2 horas de duración. Luego va decreciendo y, en mayores de 65 años, no supera los 30 minutos. Si quieres saber cuánto tiempo de la noche pasas en sueño profundo, puedes echar mano de algunas herramientas: Reloj inteligente o pulsera de actividad. Estos dispositivos van dotados de un actímetro, es decir, un acelerómetro que detecta el movimiento corporal. La pulsera traduce la falta de éste como sueño profundo y el incremento, como sueño ligero. Sus resultados son prácticos pero meramente orientativos, si se padece un trastorno del sueño es necesario acudir a un especialista que lo evalúe de manera más específica y completa. App’s para monitorizar el sueño: Polisomnografía. Prueba médica reservada a casos de trastornos de sueño. Se realiza dentro de un centro médico por la noche y consiste en el registro de las ondas cerebrales, los niveles de oxígeno en sangre, la frecuencia cardíaca y respiratoria, los movimientos de los ojos y de las piernas mientras el paciente duerme. Si te has dado cuenta de que no estás teniendo el suficiente sueño profundo, puedes solucionarlo poniendo en práctica estos 5 consejos: Practica ejercicio físico durante el día. Además de evitar las cenas copiosas o pesadas y cenar como mínimo dos horas antes de irte a dormir, es importante que no consumas carbohidratos por la noche. Además, puedes prepararte una infusión que te ayude a descansar mejor. Prepara la habitación, tiene que estar ventilada, fresca y lo más oscura y libre de ruidos posible. Procura no despertarte durante el sueño profundo. Puedes utilizar una app que detecte cuándo has entrado en sueño ligero y te despierte en ese momento. O puedes programar 2 alarmas con 20 minutos de diferencia. Si la primera, que se aconseja que esté a un volumen más bajo, coincide con la fase de sueño profundo, 20 minutos serán suficientes para que tu cuerpo haya cambiado de fase. Y si tienes que despertar a alguien con sueño profundo, no te pierdas estos trucos para conseguirlo. Su falta, además de hacernos sentir cansados, está relacionada con diversas enfermedades como el Alzheimer y algunos trastornos del sueño. Puedes poner en práctica los sencillos consejos que te hemos dado para alargar tu sueño profundo y conseguir despertarte descansado cada día. Pero, en caso de padecer algún trastorno del sueño, lo más recomendable es que acudas a un especialista. Diplomada en fisioterapia por la Universidad Castilla-La Mancha especializada en posturología y recuperación funcional. Además de probar los colchones más novedosos del mercado, también escribe guías para ayudar a nuestros lectores a mejorar su descanso y hábitos de sueño.¿Por qué necesitamos el sueño profundo?
¿Cómo saber si te falta sueño profundo?
Consejos para alargar el sueño profundo
Conclusiones